sábado, 31 de octubre de 2009

Aún vago por tu recuerdo, Poema, Segunda parte


Añoro el antiguo tiempo en que la adarga de corazón,
en la madera y el hierro, mandaba con su esplendor.

Escudo.
Heridas.
Clamor.


Su olor en mis poros tensos, todo mi cuerpo impregnado,
para aromar más intenso , en mis desiertos mojados.

Hambre.
Estertores.
Sudor.

Mazas, lanzas y mi espada…recuerdo esos instrumentos,
que debí guardar con calma, ya con el paso del tiempo.

Nostalgia.
Caricias.
Evocación.






Los cambié por el laúd y la rítmica sextina,
guardé el pasado de luz, sin dolor y sin inquina.

Otoño.
Entereza.
Tesón.


Desnudo en remordimientos, decidí cambiar el mundo
con profundos pensamientos y cavilares fecundos.

Versos.
Cantares.
Razón.


Y susurré en Occitano los más adornados versos,
con mis musas de la mano, fui avanzando sin esfuerzo.

Encantos.
Lámparas.
Fascinación.


No importó si se entendía, su sentido verdadero,
fomenté las fantasías y los instintos primeros.

Gracia.
Misterio.
Seducción.


Mostré gaviotas divinas a los que el mar nunca vieron,
y el hedor de sangre ardida, a las que nunca la olieron.

Sal.
Sortilegio.
Pasión.


De aquella que en las batallas por rojos ríos se fueron,
manché el candor de esas damas que de la corte no huyeron.

Sonrojos.
Cerrojos.
Pudor.


Pero siempre extrañaré, aunque los siglos me apresen…
tus ojos… su brillantez, aunque mil soles me besen.

Tristeza.
Ternura.
Calor.



La expresión de tu mirada, jugando con mis temores,
mientras mi lengua callaba, transformando sus colores.

Magia.
Lujuria.
Fervor.




Predominaba el azul, pero al ver que reprimías
los suspiros en el tul chispas ardiendo volvían.

Añiles.
Zafiros.
Fusión.


Y temblaban mis cimientos… Un verdemar, desde el alma,
a tus pupilas de viento le daban paz y esmeraldas.

Selvas.
Savia.
Ignición.


Posesos de tintes glaucos, como el color de las algas
en playa de sueños vagos, que sólo en su ardor, me salvan…

Sales.
Aceite.
Combustión.


Jamás conocí persona, que sin eco así gritara,
desde el silencio que añora, desde un hueco sin palabras.

Mutismo.
Afonía.
Intuición.





Ya no deseo otra cosa, que ver tu cuello delgado,
columna de fuego y rosas, tan bello como un pecado.

Serpientes.
Manzanas.
Posesión.


Movido con elegancia, arqueado en forma suprema,
tejido con la prestancia del mar al mover la arena.

Garbo.
Tersura.
Distinción.


Sólo deseo mis yemas… sobre tu piel delicada,
de fuego y seda, caricias …de terciopelo bordadas.

Roces.
Suavidad.
Discreción.


Pero no alcancé a morir, posando un beso en tus labios,
torrentes de fe y sentir, encendiéndome los años.

Cruces.
Volcanes.
Rebelión.


Como un simple trovador, no logré vencer los miedos,
y siento en mi corazón, que los tuyos persistieron.

Ansiedad.
Recelo.
Turbación.


Hoy, tantos siglos después, sigo soñando tus ojos,
con tu cuello, con tu piel, aromando mis antojos.

Almizcle.
Pócima.
Adicción.


Tan bellos como un vergel, embriagándome esa noche,
con tus efluvios de miel, de arándanos, sin reproche…

Apetencia.
Anhelo.
Desesperación.


Me gritaban sin hablar, en un silencio embrujado,
me hechizaban sin piedad, y aún sin hablar…hablamos.

Ecos.
Clarividencia.
Percepción.


Si en aquel instante me hubieras ungido con ese mundo
de fragancias hechiceras, mis sentidos no andarían…

Sombras.
Velos.
Intención.

en tus sábanas mezclados, de tus cascadas sedientos,
como un fantasma encelado, vagando en tus aposentos.

Agonía....
Deseo.
Obsesión...

viernes, 30 de octubre de 2009

Aún vago por tu recuerdo, Prosa, Primera parte


INTRODUCCIÓN

"AÚN VAGO POR TU RECUERDO"


Siempre me atrajo el contraste y el dialogo. El aumentar basado en las contestaciones a unas afirmaciones que siempre son argumentales.

Hoy quiero que seáis participes de una experimentación en este blog. El dialogo entre varios personajes:

  • Un trovador
  • El fantasma de ese trovador
  • La reencarnación de ese trovador
  • La amada, siempre presente, siempre en silencio.


Como la idea se quedaba corta en verso la he desarrollado también en prosa, por lo que os pido paciencia hasta que lleguéis al final.

Es una entrada larga, pero realizada con todo el cariño posible. Hoy la primera parte, o visión en prosa.



AÚN VAGO POR TU RECUERDO, prosa

Añoro los tiempos aquellos en que la adarga mandaba sobre la madera, sobre el hierro. Su olor pegadizo en cada poro del brazo, de la mano, en cada una de las canas de mi cuerpo. Recuerdo mojarla para hacer el olor más intenso.


También recuerdo la maza, la lanza, la espada... meros instrumentos que llegada mi decrepitud física cambié por el laúd y la sextina sin ningún remordimiento. Puede que logrará cambiar más el mundo con la palabra que con la fuerza de mis músculos; sin duda pudo más el intelecto.


Aprender Occitano fue un camino tan bello; sus sonidos arrancaban siempre breves susurros en la sala aunque no entendieran el significado de los versos. Incluso callé el laúd más de una vez para que comprendieran el sentido verdadero, para que vieran volar gaviotas los que el mar nunca vieron, para que olieran la sangre de las batallas aquellas damas que nunca de su castillo se movieron.


Pero lo que siempre echaré de menos, por muchos siglos que transite, por muchos amaneceres que besen mi frente, será la expresión de tus ojos. Variaban de color juguetones, reflejaban tus miedos, mis miedos. Predominaba el azul, no lo niego, pero cuando reprimías esos suspiros que de soltarlos hubieran temblado los cimientos adquirían tintes glaucos, el color de las algas en aquella playa que nunca vieron. Jamás vi persona que mejor gritara en silencio.


No deseo otra cosa más que volver a ver tu cuello. Delgado, columna de fuego que movías con una elegancia suprema, que arqueabas como arquea el viento a los chopos en las noches de invierno. Siempre soñé acariciar esa delicada piel que sobresalía entre bordados y terciopelos. Pero nunca alcancé a morir posando mis labios en ese torrente de sentimientos. Nunca logré ser más que un simple trovador, nunca venciste tu miedo, mi miedo.


Hoy, siglos después, sigo soñando con tus ojos, con tu cuello, con tu olor que percibí aquella noche que hablamos, ese olor que gritaba en completo silencio. Nunca había sentido seducción más intensa que la que intuí en esa fragancia que adornaba tus manos, tu pelo.


Si me hubieras ungido con ese mundo de olores tal vez no vagaría ahora por los mismos aposentos.




jueves, 29 de octubre de 2009

Mañana de Julio


Una soñada presencia ausente se forma

entre el humo del café y el picor del sueño

entre el olor a pan recién hecho y tinta seca

necesito tres sorbos ardiendo para entender

que la suerte a veces juega en silencio.


Y amaneció de repente

estallaron mis ojos como dos granadas,

no sé qué decir

¿acaso puedo?


Todo se resume en una frase

todo se resume en un ruego

todo se resume en hincar la rodilla

todo se resume en un ¡ay! lastimero


Puro fuego.


Instante cautivo entre dos nervios

tránsito entre espigas de hierro

inconcluso seguir empezando

nacer y morir en un momento

aprender a nadar sin guardar los ojos

descubrí con asombro un aguacero en mi pecho.


El ayer convertido en mañana

un ángel se vierte sobre un guerrero

luminosa mañana de Julio

tiemblo bajo el sol

reto al destino en secreto.

miércoles, 28 de octubre de 2009

Se despeña


Se despeña el geranio desde el balcón

como se lanzan los tobillos de esa niña

por la espalda eléctrica

del funámbulo que encontró el maullido.

Declinamos conjugaciones latinas

con la esperanza de encontrar en el mapa

el tempus que se perdió paseando

por aquel valle relleno de niebla azulada.


Tú y yo, ¿vestales o monaguillos?

¿Acaso los niños jugarán mejor a la peonza

por contestar preguntas raídas?

Ven y tomemos chocolate con uvas

mientras nos acaricia el verbo exultante,

ven y tomemos helado licor de limón

a la vez que nos besa una nube los pies.


Siento en mis labios mantequilla salada,

luchamos como dos gladiadores

…………¿Te gusta ganar?

…………No temas, sé que voy a perder mientras gano.

Sello columnas con tizones de piel

y tú entierras caracoles en una V.

martes, 27 de octubre de 2009

La acacia y sus frutos


Cae la noche como una cascada de lunares

entretengo mis ojos en corrientes de aire

entretejo verdes hojas con granito frío

entretanto saco mis tendones a orear.


Relleno formularios solicitando brisas

que resuman laderas gastadas por muflones

recito un montañero medio loco

arrancando zarzas sin miedo a las espinas

retiro mis dedos de la lámpara de pie

recuerda las farolas de un París húmedo.


Suena una y otra vez el telegrama no enviado

el suéter susurra al oído

canciones hablando de bodegas en el cielo

suelo y techo no son líneas paralelas

el tejado deja todos sus huesos al aire.


Me gustaría contar la verdadera historia

pero el paracaídas se entretuvo con una nube

y no dejo de preguntarme

¿Quién soy yo para hablar de la mujer de Jesucristo?

lunes, 26 de octubre de 2009

Neuschwanstein

Dedicada a Luis II de Baviera, su obra y su mecenazgo

Le llamaron loco

por bañarse desnudo en invierno

allí donde el agua hería;


reputaban todos su osadía

de construir un cisne de piedra

reflejo sin duda de extrema pureza;


la eterna búsqueda reflejada

por su amigo en espeluznante Parsifal

traspasa materia y se instala

en el aire que acaricia todo el lugar;


¿Loco?


¿Por querer ver la luna bañándose

desde su misma cama?

¿Por vivir en la sala del Grial

acompañado de Isolda y Tristán?


¿Loco?



¿Por no querer aceptar la cruda realidad

que le regala y le castiga a la par?


Loco, puede, pero sin duda genial.

domingo, 25 de octubre de 2009

Compartido con Ana - Silpàna




Hoy domingo, comparto un trocito de este blog con otra persona especial: Ana de El blog de Silpana.

Ya sé lo que estáis pensando la mayoría: pero si Ana no escribe poemas... Bueno, a decir verdad publicó un haiku en su blog. No escribe poemas. Pero aceptó la propuesta que la lancé y escribimos entre los dos un poema, que creo merece la pena leáis.

¿Por qué Ana? Por su sensibilidad sobre todo, por su buen hacer con las letras, por que nunca había escrito poemas y siempre pensé lo bordaría (como ha sido)

¿Cómo es Ana? Estuvo "disfrazada" de sirena mucho tiempo, pero lo que no contaba ella es que se convertiría en una sirena con piernas. Es amor. Es mar. Es belleza en lo que hace.. es "mi Sirena".
Y ole por mi objetividad... es lo que hay.

Vamos con el poema, esperamos os guste.

SUEÑOS DE SAL

Me acercaré sin temores…


Arrojaré los miedos domesticados a una tumba.

Beberé sobre ella la sangre de mi eral salvaje.

Me atreveré a subir desde mi vera a otro puerto.


Cambiaré…


Un puñado de arena azafrán

por el enorme paisaje de un deseo.

La espuma que tersa mis tobillos

por una montaña que viole las nubes.

Mi caracola que reza en el silencio

por algún verbo que aprese los azules.


Me abandonaré en los brazos de un sueño…


Y esperaré desnuda de tormentos,

mojándome los labios con palabras dormidas,

ésas que aguardarán en mi boca su momento,

el oportuno para explotar encendidas…

Y recogeré las rosas sin espinas

que alguien dejará sobre mi cama,

cualquier día de éstos…


Entretanto...


Caminaré despacio

por el sendero del puerto,

llevando conmigo la sal de esta playa

derramada en el cristal translúcido de mi cuerpo …