Reflejándose
en la mirada que desafía
las volutas de Chopin se
inclinan
dónde está el sol dónde el
silencio
dónde se esconde esa semilla
a punto de principiar en
trazo limpio
dónde el resplandor dónde la
fe
mano tendida sobre el blanco
roto
serenidad al reír el alba
acometer el conocimiento
esperanza siempre clavada en
la pupila
voz y granito elipsis luz abstracción
fuerza duelo calor y caricia
prestancia surgiendo mezcla
de sangres
Por una puerta entreabierta
(surge el) eterno revolotear de fractales
4 comentarios:
Estoicas flores de nieve que le dan mucha fuerza, y garra a los versos...
Una sola flor en la nieve ya es VALENTÍA.
Abrazos y felicidades,desde Chile.
No sé dónde están todas esas cosas por las que preguntas Manolo, pero seguramente las buscamos tod@s
Un abrazo
Esperanza, Manolo.
Hasta (el fin de) la esperanza.
Un beso.
SIL
Me agradan las notas de Chopin, lentas, sentidas, emocionadas...
Dónde todo...? Ahí, donde alcanza la pupila, que se adentra y se esfuerza por mantenerse entre una puerta abierta (mientras se mantenga abierta)...Todo es eterno. La fe, es un punto en nosotros y más allá de nosotros; abajo y arriba; y dentro y afuera...por sobre todo conocimiento.
Me gusta mucho este poema, sus dudas, son una búsqueda deseada.
Otro abrazo
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