lunes, 1 de noviembre de 2010

Ninfa gentile



diecitantos años y esa melena sonriente
veintitantos años y ese sangrar por las ingles
pasaron tantas aguas
pasaron tantos vientos meciendo higueras
pasaron tantas horas como promesas ardientes

las ovejas y las máquinas de coser se oxidaron
los ágiles dedos pasaron hojas y hojas
en vez de enredarse como ovillos de perlé
                                       banderas en el reloj
                      risas domesticando el puente
detrás de la iglesia                                                 detrás

hombros que ahora son de agua recia
pecho que sigue llamando al labio y la saliva
palabras que permanecen inalteradas

llegará el invierno blanqueando médulas
llegará la noche rozando silencios
mas ¿dónde están los suspiros que arrancábamos?

15 comentarios:

Carmen dijo...

creo que están protegiéndose del invierno helador, esperando al labio y a la saliva

Besos

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Es inevitable que el invierno llegue y vaya cubriendo de blanco... hubo un tiempo que fuimos, otro en lo que todavía somos y otro tiempo habrá en que no seremos... o si ?
Un abrazo Manolo .

lichazul dijo...

un destino que avanza inclaudicable...dónde quedaron las mixturas y los sonrojos
quizá en un recuerdo bordado

besitos de luz
buen inicio de semana

Anónimo dijo...

El tiempo pasa... y no queda otra pero no por ello se deben abandonar los suspiros
Besos desde el abismo

Unknown dijo...

siempre se avanza...siempre se recuerda...y me fascinó ese momento
"risas domesticando el puente
detrás de la iglesia...detrás"

Un besooooo!!!

Amelia Díaz dijo...

Probablemente, formando nubes de versos tan hermosos como los tuyos, poeta.

Un beso!!!

Annick dijo...

El tiempo pasa demasiado de prisa para algunos y muy lento para otros ...

Besos desde Málaga.

SIL dijo...

Me inclino Poeta, ante este poema.

La inspiradora de estos versos te adora, se sonreirá y los acariciará con un guiño de sol.

Un beso grande,


SIL

Anónimo dijo...

Cincuentaitantos..."pasaron tantos vientos meciendo higueras"...
Aún sigo arrancando sus suspiros.

Un abrazo.

tinta negra dijo...

el tiempo siempre ha de pasar imparable!°

Saludos!°

Antonia Maíllo Zamora (Antoñi) dijo...

El tiempo y sus redes, atrapa lo mejor y lo deja enredado en el recuerdo de lo que fue, antes de la transformación. Creo, amigo Manolo, que siempre queda algo, de todo eso; la sonrisa de la niña, cuando se abstrae del tiempo y del espacio, la ilusión, en honda melancolía, como una nube de colores que se pasea al frente de nuestros pasos....

Leerte, es siempre un agasajo bonito, una caricia del viento en la mejilla, gracias poeta...
Besos

Paseo de Letras dijo...

Siempre es un placer leer tus versos intemporales. Te felicito.
Abrazos

hécuba dijo...

El invierno siempre llega, aunque intentemos cerrar los ojos con todas nuestras fuerzas para que no aparezca. Igual que la noche.

Marinel dijo...

El tiempo en su pasar,pesa y crea hondo pesar.
No vuelven los supiros de esa juventud que se lleva el tiempo a su paso.
Muy duros estos últimos poemas,Manolo.
Sin embargo,siguen manteniendo la belleza intacta.
Más besos.