miércoles, 18 de febrero de 2009

Espínelas del celoso enamorado



Yo puedo amarte infinito,
darte mi querer eterno,
entregarme quedo, tierno,
hasta sentirme proscrito
de este mundo. Y medito
sobre mi gran dedicación,
toda ofrenda, hasta esta canción,
¿acaso turba tu ánima
hasta hacerte magnánima
frente a mi pobre corazón?


Tu amor, de sobra probado,
lo percibo incuestionable
y a mi solo es achacable
el temor, antro acerado
del que salgo con agrado
para volver a él, incierto;
y luego vuelvo al aserto
de mi vacua incertidumbre
¿Será acaso fea costumbre
mía el no ver lo más cierto?


Rezuman tu alma y la mía,
estimación se profesan,
ambas se aman y embelesan
mirando la algarabía
del cariño que a porfía
se muestran sin ningún pero.
Pero acaso yo adultero
mis sentires más hermosos
y ya no contemplo, acuosos
mis ojos, tu amor sincero.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Joder Manuel! ¡Este poema es precioso!

MIGUEL

estoy_viva dijo...

Precioso poema me has dejado con un agradable sabor.
con cariño
Mari

Anabel Botella dijo...

Qué hermoso poema, me ha producido hasta un escalofrío. Muchas gracias por visitarme. Tienes un blog muy bonito, tanto como tu poema.
Saludos desde La ventana de los sueños, blog literario.

Paco dijo...

Me acabas de alegrar el dia de hoy
Precioso poema para recitar a la persona que amas.

Un abrazote

SIL dijo...

El poema merece que alguna varita lo tocara y se volviera canción.-
Me recordás historias de otros tiempos, donde los hombres gritaban con pasión y palabras de orfebre a sus damas lo que sentían.
Por momentos,te volvés shakeasperiano... uy !
Misterioso y enamorado, hubieras sido una buena inspiración para algún autor clásico.

Un saludo desde el sur más sur del mundo.

Maria Susana dijo...

Hermoso! Maravilloso! Tambien me gustaron mucho: Sentir y Soledad.
Las fotos que elegis para tus textos, son las indicadas!
Me encantan!